LIMPIAR, CARGAR Y PROGRAMAR NUESTROS MINERALES.
Limpieza energética: hay distintas formas de realizar la limpieza de las piedras. A mí me gusta realizarla con los cuatro elementos: fuego, aire, agua y tierra.
Si es la primera vez que voy a usar la piedra, dedico 1 día para cada elemento. Es decir, un día para limpiar la piedra en fuego, otro en agua…ya que la piedra ha pasado por distintas manos y lugares hasta llegar a nosotros/as.
Si es la limpieza cotidiana, en un mismo día hago que la piedra pase por los cuatro elementos.
Agua:

Existen varias opciones:
- Vaporizador de esencias, eligiendo esencias suaves como lavanda o mandarina. Coloco la piedra en el vapor que desprende y voy dándole vueltas para que el vapor recorra toda la piedra.
- Colocar la piedra en un recipiente con agua y flores de lavanda o romero. Colocando también 3 gotas del aceite esencial que nos guste.
- Hay personas que usan el meter la piedra con agua y sal pero hay que ser cuidadosos porque puede ser dañada.
- Llevarte la piedra al río o al mar, sujetándola dejar que las olas del mar la limpien o el agua del río que pase por ella.
- Spray limpiador realizado con elixir de piedras purificadoras.
Aire:

- Humo de incienso: quemar una varita de incienso y pasar la piedra por el humo.
- Palo santo: quemar palo santo y con ese humo hacer la limpieza.
Fuego:

- Hacer un fuego en tierra para pasar la piedra por él, hay que ser muy cuidadoso.
Tierra:

Entierra la piedra en una maceta o en tu jardín.
Como comenté antes, si voy a usar un día para cada elemento realizo lo siguiente:
1º día, por fuego. Hacerlo por la mañana , al mediodía y por la noche.
2º día, agua. Dejo la piedra sumergida en agua durante todo el día. Este método puede realizarse con casi todas las piedras.
3º día, aire. Por la mañana , al mediodía y por la noche realizo algunas de las opciones propuestas.
4º día, tierra. Dejo la piedra todo el día metida en tierra.
Si es la limpieza habitual, en un mismo día realizo todos los métodos:
Por la mañana, fuego.
Al mediodía, dejo un par de hora la piedra en agua.
Por la tarde, paso el incienso o el palo santo.
Por la noche, la dejo en tierra un par de horas.
Esta es mi metodología, pero puedes usar la de los 4 elementos la primera vez que llega la piedra a ti y luego de forma habitual elegir una de las propuestas sin necesidad de pasar por los 4.
Cargar
Realizando baños de sol o de luna podremos potenciar la energía y el poder intrínseco de las piedras.
Es importante saber que las piedras que son de colores fríos se cargan con la luna y las que son de colores cálidos se cargan con la luna.
De esta forma, las piedras con la que vamos a trabajar son de color rosa, blanco, morado, azul, verde…son cálidos por lo que se deben cargar con la luna.
Es muy sencillo, poner un recipiente o bandejita en una ventana o balcón donde le de la luz de la luna. Pienso que cualquier luna es maravillosa pero suele cargarse con luna llena ( y limpiarse con luna nueva). Es recomendable que en momentos de eclipses no cargues las piedras con la luna porque la energía que en ese momento hay es muy potente.
Al ser cargadas con la luna , la energía es más sutil, más suave, más amorosa.
Programarla:
La piedra ha llegado a ti, a tu hijo o a tu hija por alguna razón. No pienses que tú has elegido a la piedra. Por eso, a veces pienso que ella ya sabe lo que tiene que hacer. Pero si la programamos dirigimos toda su energía para un propósito.
Así que coge la piedra con tu mano , ¿ con qué mano? ¿ derecha o izquierda? Esto va a depender de la función que tú quieras darle a la piedra.
Si tú quieres que la piedra te ayude a eliminar malestar, inquietud…cógela con la mano derecha, es la mano masculina, la mano que da, que entrega. Pon la mano en el corazón y pídele que te ayude a quitar esa ansiedad, por ejemplo.
Si tú quieres recibir las propiedades de la piedra , cógela con la mano izquierda, la mano que se relaciona con lo femenino, con la que recibe, la que absorbe. Pon la mano en el corazón y pídele que te aporte tranquilidad, por ejemplo.